"El que hoy quiera vivir y alegrarse de su vida, no ha de ser un ser como tú ni como yo. El que en lugar de chinchin exija música, en lugar de placer alegría, en lugar de dinero alma, en vez de loca actividad verdadero trabajo, en vez de jugueteo pura pasión, para ese no es hogar este bonito mundo que padecemos..."
HAGAMOS QUE LO SEA!

domingo, 27 de septiembre de 2009

Fábula Final con moralejAmoraleja

En la ciudad de los Raros Vientos, volviendo, caminando por un sendero material, una gusana solitaria, se encontró con un pato (estático en un charco de agua) y con un pájaro.
En la tierra donde ella estaba, se encantó con los vuelos del pájaro,
(planeando alto y bajo dependiendo el momento)
y además, porque en su encuentro, su primer reacción, no fue querer devorarla.
Bien apegada a alguna de sus plumas, volaron juntos, por algunos cielos despejados y también nublados. Ellos sabían que provenían de distintos lugares pero individualmente eran tiernos y juntos emanaban amor, esencia de la cual las palabras no pueden explicarla porque la esencia está “más allá de lo visible” o “lo esencial es invisible a los ojos”
–La que más les guste-.
Adonde sea que iban todo se iluminaba, incluso hasta los de sus especies, a veces adoctrinados en el maltrato y la cacería, los trataban con suave calma.
Compartieron poco pero se conocieron y sintieron como si uno de ellos fuera de su misma especie (aunque no lo eran).
Ella contemplaba su Vuelo y él su Tierra.
Hasta que la gusana se transformó en mariposa.
Conocía la Tierra y ahora también disfrutaba del Vuelo, frágil, suave y liviano. Se dejaba llevar por él.
Sabía que no podía ser de otra forma, ya que su vida era corta y bien sabía también, que esa luz generadora de buena energía no podría durar demasiado en un lugar con tanto cemento por medio…Donde la ternura era casi milagrosa y donde todo lo que parecía ser felizmente concebido, no era más que una gran mentira enseñada, con miles de educados.
La mariposa hacía rato, se había dado cuenta que su vida sólo tenía 24 horas, aunque completamente inexperta del tiempo, “sus ojos liberados deteníanse en el plano de lo inmediato y veían y reconocían cuanto era visible, familiarizándose con este mundo sin preocuparse por su esencia ni aspirar a una más allá”.
Sin conciencia alguna sabía que lo que vivía a cada instante era único y, en su vuelo, no tenía espacio para buscar explicaciones.
Un día, el pato, al notar su brillo, sus terribles ganas de vivir, que en ese instante eran compartidas, sacó la cabeza del agua estancada y la tentó con sus sorprendentes ofrendas…La mariposa anonadada, se paralizó, porque a pesar de conocer bien al simple pato, le dio demasiada importancia a sus actuaciones poco comunes (imitaba a cualquier animal con sonidos novedosos), pero sobre todo, le dio importancia a sus palabras, a las palabras…Cómo pudo darle tal importancia?! Sabiendo que los patos no hablaban?!
El pato creyó sentir algo…Algo de vuelo, como tal vez en algún momento pudo realizarlo, pero sólo y muy cerca del agua, muy cerca su cabeza dentro, hundido en ella, en el agua, pero más que nada en su cabeza.
Fue entonces cuando la mariposa, se volvió a transformar en gusana.
Se puso triste al ver que todo sí tenía una mera explicación y que, su intervalo de alegría y vuelo, había terminado.
Entonces se dibujó.
Una gusanita era, en medio de una pradera pavimentada, hasta que se dio cuenta que si podía dibujarse a ella misma, también podría volver a ser la mariposa y tal vez, también, dibujar al pájaro (pero no lo hizo porque entendió que él estaba preocupado por su impulsivo vuelo subrayado y más que nada porque su verdadera profesión era encontrar el camino…Casi travesía, hacia sí misma).
Así, con trazos finos y delicados esta vez, volvió a ser una mariposa. Pero esta vez voló sola, disfrutó cada recuerdo y cada momento, cada especie, cada semilla, tachó el tiempo y pudo sentir que si realmente existía un Destino, por qué tener miedo…Se divertía volando y cuando extrañaba la Tierra se volvía a dibujar y se transformaba en gusana y luego dibujaba diferentes alas y volvía a ser mariposa. Y sorpresivamente fue encontrando y reencontrando distintas mariposas y gusanos que también se dibujaban y que, a pesar de, todos ser bien diversos con sus trazados, había algo que los unía…El valor de la existencia.
Ahora, se arrastraba y volaba, entre el suelo y el cielo…pero con diferentes líneas…Y así era una gusana mariposa, impredecible y desigual, cada día y a cada rato…A veces volvía a ser la gusana solitaria, porque lo disfrutaba, pero siempre, recordando y cuidando a sus distintos semejantes, afortunadamente unidos y conmemorando, continuamente, lo linda que era la vida, pero por sobre todo, lo lindo que era estar vivo.

domingo, 20 de septiembre de 2009

Ojales

Mazo de cartas por medio

Sentada en una silla vieja
de metal, fría
atada de manos y pies
cintura

Soga firme alrededor




Los pies sobre el suelo
mojado,
resbala
cuelgan del apoyabrazos
las manos
luz verde a los dedos
desata nudos, voces viejas

Se corta
con aquello que la ata
se siente viva
siente la opresión de la piel,
la tensión, la carne
despellejada,
sangra

Sonríe, se desenrosca

Sus alas aplastadas
la ayudan a mantenerse en pie

Vuela

Sale por la ventana
ve borroso,

pero disfruta el aire en la cara
se da vuelta
mira lo que quedó atrás
sonríe nuevamente
gira otra vez
se toca las venas
siente el corazón
latiendo con toda la fuerza
se siente viva

Vuela

Frena y baja

Una mujer amplia
temblorosa
la mira con su alma en pena
le clava el vistazo
en el centro
entre pecho y dolor de cabeza

Intenta despegar
pero sus alas desaparecen
se desvanecen con el viento

Será cuestión de caminar…
No cree todavía
haber aprendido a volar
sonríe de nuevo…
Habrá que notarlo nomás.

jueves, 10 de septiembre de 2009

Sin Reposo

Le regalan una reposera
ideal
en el arrabal
cerrada,
aunque plegable
alumbrada por un relámpago
se abre

No tan lejos
un fulgor se siente
aparece caminando
la Vida,
las Ganas

Cerca él
Estratega del Vigor
su rumbo
la guía.

La Alegría
ve la reposera
se quita todo el ropaje
lo arroja
sobre ella
y sigue pateando

Andando desnuda

en silencio,
la Suerte,
resonando:-
¡Que lindo paseo suburbano!

Encantada
con él,
profético ser,
Humano.


miércoles, 2 de septiembre de 2009

Dietario


Agarra el diario y lo deshoja
se hace grande y serio por un rato
le cuesta entender su separación
se queda sólo
con la sección de espectáculos

Quiere manifestarse
no puede
porque necesita explicarse
siendo impenetrable

Los fenómenos
existen
y son indescifrables

Su realidad es ajena a la diaria
paralela
pero ajena

se infla el cuerpo
hasta desnutrirse
se estabiliza

Se mezcla un rato
prende un cigarrillo
otro y otro más
(punto seguido)
llenos
sus pulmones de nicotina
como en la pared
vestigios
de una estufa vieja

Toma diaria
de pastillas antidepresivas
de la cabeza
anticonceptivas
con conceptos vive
aunque practica yoga
la rutina es su raíz

Difícil es
encontrarlo sonriente
pero según él
es feliz.